El periodismo es el enemigo más peligroso que puede tener el régimen de Nicolás Maduro o cualquier otro gobierno autócrata o criminal. El gobierno de Hugo Chávez fue el primero en darse cuenta que los medios de comunicación eran quienes median sus actos y combatirían la corrupción y la violación de derechos humanos en Venezuela.

Una realidad que corrobora periodistas emblemáticos de Venezuela y parte de la región hispano hablante: Elyangelica González, periodista, Miguel Ángel Rodríguez, periodista y exdiputado a la Asamblea Nacional, y José Pernalete, periodista, se han perfilado durante años como defensores de la verdad en Venezuela y lamentablemente hoy se encuentran exiliados por hablar una verdad incómoda para cualquier dictador.

El embajador y periodista Francisco Santos tuvo una conversación con estos profesionales de la verdad sobre su situación actual en el exilio y cómo fue su batalla contra el régimen chavista. 

La entrevista

Miguel Ángel Rodríguez fue uno de los primeros periodistas en enfrentarse cara a cara con miembros y funcionarios del gobierno de Hugo Chávez a través de su programa La Entrevista que se estrenó en el 2001 en el canal Radio Caracas Televisión (RCTV). Muchos fueron los episodios donde el comunicador entraba en fuertes debates con los allegados al chavismo y con pruebas demostraba actos ilegales o de corrupción.

«En La Entrevista llegaron los personajes más importantes del chavismo (…) porque en el programa jugábamos, para tener las conversaciones, a ser un poco «el abogado del diablo» y en Venezuela, siendo un país altamente polarizado, teníamos que conocernos la narrativa de cada una de las partes (…) y ellos ya no se sentaban frente uno del otro (oficialismo chavista y oposición) a debatir, entonces venían al programa a debatir conmigo», explicó Rodríguez sobre la fórmula del programa matutino de opinión e información de RCTV.

Este programa le daba la oportunidad a cualquier de los sectores políticos a presentarse, debatir sus ideas y situaciones del día a día con Miguel Ángel Rodríguez, no obstante el periodista comenta que Hugo Chávez en su momento prohibió a todos sus funcionarios y allegados a su gobierno a no presentar en La Entrevista. «Yo les mostraba la Constitución y pasaba en contexto sus acciones a través de la carta magna y les demostraba que sus actos eran ilegales (…) si teníamos pruebas de actos de corrupción, situaciones que eran difíciles de defender, entonces la orden de Chávez fue: O lo golpean en el acto o no van más (al programa)», relató Miguel Ángel Rodríguez.

En este contexto, Rodríguez explica que La Entrevista empezó a realizar investigaciones más agudas y precisas para revelar los actos ilegales y de corrupción de los funcionarios del gobierno, además de crear más presión al chavismo y darle esa información a la opinión pública, lo cual motivó al gobierno a partir de «pautas comerciales» el intento de comprar su participación periodística.

«El presidente de la empresa 1BC, Marcel Granier, (…) nos hermanó en la lucha por libertad de expresión que es un derecho adherido a la existencia de los seres humanos (…) ¿por qué los autócratas, dictadores se enemistan con los periodistas y los persiguen y torturan? porque la verdad es subversiva y el trabajo periodístico cuando lo haces con responsabilidad haces que la gente convenga una realidad, entonces premia el que lo hace bien y cambia el que lo hace mal», comentó Rodríguez sobre la lucha que giró alrededor de RCTV como medio de comunicación entregado a una ética marcada y respeto por el periodismo serio.

A pesar de todo ese esfuerzo por mantener RCTV de pie, finalmente Hugo Chávez les niega la concesión para que se mantenga al aire, lo que ocasiona el cierre de la televisora. Miguel Ángel Rodríguez analiza que tal situación le valió al presidente fallecido la pérdida de las elecciones del 2007 sobre la reforma de la Constitución del 1999 y la rebelión de los estudiantes universitarios.

Miguel Ángel Rodríguez no solo es periodista, sino que durante los años 2011-2016 fue diputado a la Asamblea Nacional, lo cual comenta que sostuvo un trabajo periodístico independiente, porque era más fácil así ayudar a crear una unidad entre los partidos de la oposición, algo que jamás se había logrado.

El periodista también le hace un llamado a sus compañeros que trabajan en los medios de comunicación que actualmente están comprados por el régimen de Nicolás Maduro en Venezuela, los exhorta a recordar que el periodismo trabaja para la gente, se le debe entregar la verdad a la gente para que se haga sus propias conclusiones. «Si los dueños de los medios llegan con unas fórmulas que no son informativas, sino de propaganda, hay que irse de ahí, a menos que te arrodilles y rindas», sentenció Miguel Ángel Rodríguez.

Un vídeo que evidenció la violencia de la GNB

Elyangélica González sufrió lo que muchos no creían posible o que no querían reconocer aún en el 2017: la violencia y el abuso de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB).

González sufrió un ataque de varios funcionarios luego que se negara a entregar su teléfono, dispositivo que usó como herramienta para reportar la relación que existía entre la GNB y los «colectivos» para disolver protestas en ese año. Era muy común en esos años, que la Guardia Nacional retuviera o disolvieran las protestas antes que llevaran a su punto objetivo.

Más allá de las bombas lacrimógenas o los actos de represión, siempre se comentaba la relación entre la Guardia Nacional y los colectivos, no obstante ese día González fue a reportar todos los hechos que se desarrollarían por la marcha que realizaban los venezolanos por la decisión del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) asumir las competencias de la Asamblea Nacional electa en el 2015.

González confiesa que le sorprendió lo rápido que se disolvió el grupo de funcionarios de la GNB y al mismo tiempo aparecían los colectivos con botellas, piedras y armas a disolver de manera violenta la protesta pacífica que realizaban los ciudadanos.

«Yo me sorprendí y lo primero que pensé fue en resguardarme y lo primero que pensé fue en quedarme cerca del TSJ (…) mientras pasaba todo esto, yo seguía reportando con mi teléfono todo lo que ocurría a Unión Radio y Univisión, hasta que un funcionario escuchó que estaba reportando y empezó a pedirme que le entregara el teléfono», relató González sobre los hechos antes del ataque se sufrió por parte de la GNB.

La periodista se negó a entregar su dispositivo de trabajo hasta que una funcionaria la haló por el cabello y la tumbó al suelo, luego de esto varios funcionarios la empujaban y arrastraban bajo una medida violenta de represión y amedrentamiento.

Este suceso fue impactante al momento que se filtró, sin embargo en ese momento González no sabía que la estaban filmando y ante esto, se siente agradecida porque lo que muestran las imágenes corrobora su testimonio. «Mientras estaba en el suelo, una de las funcionarias rompió el teléfono y me lanzó la pantalla en la cara (…) en ese momento pensé en guardarla para que hubiese una prueba de lo que estaba viviendo», relató.

Luego de este episodio tan amargo y terrible, González continuó reportando en las protestas, sin embargo algo había cambiado.

La periodista confiesa que empezó a tener dolores musculares en los brazos, dificultad para respirar y ansiedad, además de caer en una depresión fuerte a un año de lo ocurrido. A su vez, también denuncia que solía tener llamadas de amenaza contra su esposo e hijos, por lo cual fue la razón del por qué emigró de Venezuela.

González comenta que al momento de emigrar, muchas personas que están dentro y fuera de Venezuela empiezan a tener una matriz de opinión diferente sobre la situación tan terrible que vive el país. «Las personas que aún viven allí, solo sobreviven a las cosas que pasan, mientras que quienes estamos afuera consideramos que lo que ha pasado ya fue suficiente para que el cambio sea de inmediato», reflexionó González.

Actualmente trabaja en Univisión y comenta que sus hijos, aunque han sido criados la mayoría del tiempo en el exilio, mantienen una fuerte sensibilidad relacionada a Venezuela.

Retener las emociones

José Pernalete es otro de los periodistas que vive en el exilio, empezó a destacar como reportero en Radio Caracas Televisión (RCTV) desde 1999 hasta el 2011, luego de eso decidió irse del país , logrando así diversificarse dentro de su carrera. Actualmente vive en Estados Unidos y es reportero en el medio Voice of America, periodista de investigación en el Diario de las Américas y conductor del programa Dígalo aquí en EVTV.

No obstante, para Pernalete Venezuela va más allá de un país que vive una crisis humanitaria, puesto que tiene un vínculo más fuerte que el profesional. El periodista comenta que al momento de emigrar, tuvo que dejar atrás a sus padres, hermana e hija, situación que fue sumamente dolorosa para él.

Todas estas emociones siempre fueron reprimidas, Pernalete confiesa que su esposa siempre le aconsejó que dejará fluir lo que sentía sobre el país o su familia que estaba tan lejos. No obstante el primer pasó ocurrió cuando volvió a ver su hermana luego de más de ocho años, puesto que logró viajar gracias al Parole humanitario que tiene Estados Unidos con los ciudadanos venezolanos.

«Quizás sentía ese dolor, pero no lo demostraba, pero cuando vi a mi hermana en el aeropuerto, poder tocarla y sentirla, ahí empezó a salir todo lo que sentía», confesó Pernalete.

El periodista también comenta que su sueño es tener «la casa full» con todos sus familiares, por eso es que decidió emigrar para poder ayudar a los suyos, es por eso que mantuvo esas emociones tan guardadas, para mostrarse fortalecido frente a sus padres.

Pero más allá de las emociones que puede tener sobre su seno familiar. Pernalete reflexiona sobre un sentimiento que posiblemente tienen muchos venezolanos que viven en el exterior: Si no se hubiesen ido, que más hubieran aportado al país.

El periodista comenta que el periodismo que él realizaba, aquel que es comunitario, ya no estaba teniendo el mismo propósito, porque al momento que RCTV era un canal internacional, estaba transmitiendo la información a lugares como Aruba, Curazao, pero no llegaba a esas personas que realmente necesitaban ese enfoque periodístico.

No obstante Pernalete explica que sí quisiera volver a Venezuela para aportar un grano de arena en la reconstrucción del país, pero antes de eso tiene que haber una libertad, democracia, la eliminación de la censura y autocensura, respeto para los ciudadanos y una rehabilitación de valores. Bajo este tema, el periodista considera que el cambio que necesita Venezuela no vendrá desde la política tradicional, sino que será espontáneo desde la sociedad civil.